La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), en conjunto con la Policía Nacional, ha reforzado los controles para combatir el tráfico ilegal de recursos forestales, logrando el decomiso de 18 m³ de madera en operativos recientes.
Como parte de su estrategia de protección ambiental, los operativos se llevaron a cabo en Fusagasugá y Silvania (Cundinamarca), y en Saboyá (Boyacá). La madera incautada proviene de aprovechamientos ilegales o carece de los permisos de movilización exigidos por la normativa. En Fusagasugá, se interceptó un vehículo con 5 m³ de madera en bloque procedente de Tibacuy, que no portaba el salvoconducto necesario, indicando un posible destino comercial irregular.
Hallazgos: tala clandestina y transporte sin permisos
En la vereda San Luis Alto de Silvania, se descubrió un área con tala no autorizada, donde se incautaron 4 m³ de madera ya procesada en 120 postes. Simultáneamente, en Saboyá, se retuvo un cargamento de 9.34 m³ de madera de eucalipto que circulaba sin autorización por la vía nacional.
Sanciones y llamado a la legalización
La madera fue puesta bajo custodia en el Centro de Atención y Valoración (CAV) de Flora de la CAR. Estas acciones no solo acarrean sanciones administrativas, sino que pueden configurar el delito de aprovechamiento ilícito de recursos naturales. Erika Álvarez, directora regional Sumapaz de la CAR, instó a la comunidad a regularizar cualquier actividad de tala, recordando que el trámite para obtener el permiso forestal es gratuito y ágil, e incluye compromisos de compensación ambiental.





0 comentarios